La Agencia ambiental de Estados Unidos licenció alrededor de 200 empleados

El gobierno de Estados Unidos, bajo la administración de Donald Trump, ha ejecutado una orden ejecutiva que elimina todas las oficinas de programas vinculadas a iniciativas de diversidad, equidad e inclusión (DEI).

Esto ha tenido un impacto directo en los empleados de la Oficina de Justicia Ambiental y Derechos Civiles Externos de la Agencia de Protección Ambiental (EPA), quienes han sido colocados en licencia administrativa remunerada.

Más de 160 empleados de justicia ambiental en la EPA se han visto afectados por esta medida a nivel nacional. Un correo electrónico interno de la EPA, que fue confirmado por empleados afectados y tres fuentes sindicales, detalló la situación.

Esta grandiosa medida ayudará a alivianar los innecesarios gastos realizados durante la administración Biden en temáticas relacionadas con políticas de DEI, ahorrando millones de dólares de los contribuyentes estadounidenses. 

Theresa Segovia, administradora interina de la Oficina de Justicia Ambiental y Derechos Civiles Externos, informó a los empleados en una llamada grabada que aquellos que realizaban al menos el 50% de sus tareas relacionadas con la justicia ambiental o trabajos no estatutarios serían colocados en licencia administrativa con beneficios completos.

Se les informó que recibirían un correo electrónico el jueves notificándoles sobre esta decisión mientras se evalúa la necesidad de seguir contando con los mismos. 

Este programa de ''justicia ambiental'' tiene como objetivo garantizar que las políticas, subsidios e iniciativas federales protejan a las comunidades desatendidas de los impactos negativos desproporcionados sobre la salud y el medio ambiente.

Además, la oficina era responsable de implementar la iniciativa "Justice 40" de la administración de Joe Biden, que se encarga de que los fondos federales destinados a combatir la crisis climática lleguen de manera equitativa a las comunidades desfavorecidas.

La decisión de colocar a estos empleados en licencia administrativa remunerada sigue una serie de medidas implementadas en la EPA bajo la orden ejecutiva del expresidente Trump, que requiere la eliminación de oficinas de justicia ambiental y posiciones relacionadas con la diversidad, equidad e inclusión.

En una reunión reciente con el personal de la oficina, la dirección de la EPA les informó que la orden ejecutiva sería aplicada de manera similar a cómo se ejecutó en la oficina DEI de la agencia, que fue cerrada y cuyos empleados fueron puestos en licencia administrativa remunerada hace dos semanas.

La presidente demócrata del sindicato AFGE Local 704, Nicole Cantello, comentó que de llevarse a cabo la colocación de más de 100 empleados de la EPA en licencia administrativa, sería un hecho sin precedentes en la historia de la agencia.

"No hemos experimentado nada similar en los 34 años que llevo trabajando en esta agencia", señaló Cantello antes de la notificación de la licencia.

Los empleados de la EPA se han mostrado en desacuerdo con las afirmaciones de los funcionarios de la administración Trump de que los programas de justicia ambiental son simplemente iniciativas de DEI, considerando erróneamente que tienen un objetivo más profundo y específico en relación con las comunidades marginadas.

La medida también se da en un contexto legal adverso, ya que un juez federal suspendió temporalmente la fecha límite para la "oferta de compra" propuesta por la administración Trump, lo que generó confusión en la EPA sobre cómo proceder con las licencias y otras decisiones.

Segovia, en la llamada con los empleados, reconoció que la pausa en el programa había generado incertidumbre, pero les indicó que aún podrían aprovechar la oferta de renuncia diferida, aunque no se había recibido nueva orientación respecto a este tema tras la audiencia judicial.

El clima en la EPA es de creciente incertidumbre. A pesar de que muchos empleados esperan que las licencias administrativas sean la primera de muchas medidas de la agencia, también hay un sentimiento de frustración y desconcierto ante el manejo de la situación en la ineficiente organización.

Los trabajadores de la EPA han manifestado que no comprenden por qué se está eliminando un programa tan ''importante'' para las comunidades más vulnerables, y su descontento crece a medida que la administración continúa aplicando esta política.

La gran decisión de colocar a estos empleados en licencia administrativa remunerada, junto con la eliminación de programas esenciales para las comunidades más desatendidas, ha generado un malestar generalizado entre los trabajadores de la agencia.

Sin embargo, la sociedad estadounidense ve con buenos ojos esta clase de medidas, dado que en los últimos cuatro años, la administración demócrata se encargó de dilapidar grandes sumas de dinero en programas sin sentido.