Insólito: depravados se mostraron desnudos en bicicleta por un pedido insólito

El pasado fin de semana, las calles de Melbourne fueron el escenario de una polémica manifestación: el World Naked Bike Ride.  Bajo la excusa de promover la seguridad de los ciclistas y la sustentabilidad ambiental, cientos de personas recorrieron la ciudad completamente desnudas, generando fuertes críticas por parte de los ciudadanos que se encontraron con esta escena en pleno espacio público.

Lo que en un principio fue presentado como una protesta hippie, derivo en un espectáculo grotesco que desafía normas básicas de convivencia y respeto por el orden público. A pesar de los intentos de sus organizadores por justificar la iniciativa con consignas como la "diversidad corporal"  o  "el cuidado del medioambiente", la realidad es que la marcha se ha convertido en una excusa para el exhibicionismo masivo.

Para algunos participantes, desnudarse en la vía pública es una "experiencia liberadora". Dearne Weaver, una trabajadora comunitaria de 61 años que ya había asistido en 2019, celebró la jornada argumentando que busca "normalizar la desnudez fuera de un contexto sexual". Sin embargo, para muchas familias y ciudadanos que transitaban la ciudad, el evento resultó ser una imposición desagradable que expone a menores de edad y a quienes no desean ser partícipes de semejante exhibición.

¿De dónde salió esta tendencia que se volvió viral en los últimos años?

El World Naked Bike Ride  tuvo sus inicios en la década del 2000 como una protesta en España y Canadá.  En 2004, el activista social Conrad Schmidt organizó la primera edición oficial en Vancouver, y desde entonces, la polémica marcha nudista se ha extendido a más de 70 ciudades alrededor del mundo. Londres, Portland y Byron Bay son algunas de las urbes que permiten esta exhibición pública bajo el argumento de la protesta social.

La falta de límites y controles convirtió esta manifestación en una excusa perfecta para el descontrol, donde los participantes desfilan completamente desnudos sin que nadie ponga un freno.  Mientras que en otras partes del mundo este tipo de actos podrían ser sancionados, en Melbourne la permisividad ha llevado a que la Policía colabore con la organización del evento desde 2006, asegurando intersecciones y permitiendo que la marcha se desarrolle sin incidentes.

Los organizadores invitan a los participantes a despojarse de sus prendas bajo la consigna  "tan desnudo como te atrevas", lo que ha generado el rechazo de numerosos sectores que ven en este tipo de eventos una preocupante tendencia a la normalización del exhibicionismo en espacios públicos.

A pesar de que la marcha se mantuvo en secreto hasta el último momento para evitar "aglomeraciones", la realidad es que cualquier transeúnte que circulaba por la zona se vio forzado a presenciar el desfile de ciclistas desnudos sin previo aviso ni posibilidad de evitarlo.

Mientras tanto, los organizadores insisten en que se trata de un evento "pacífico", aunque la indignación de muchos ciudadanos demuestra que esta provocación poco tiene que ver con una causa legítima y mucho con una actitud de transgresión sin límites.